lunes, 30 de agosto de 2010

Deshechos


martes, 24 de agosto de 2010

... ROMA.




...Yes, 'n' how many seas must a white dove sail
Before she sleeps in the sand?
Yes, 'n' how many times must the cannon balls fly
Before they're forever banned?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

How many times must a man look up
Before he can see the sky?
Yes, 'n' how many ears must one man have
Before he can hear people cry?
Yes, 'n' how many deaths will it take till he knows
That too many people have died?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

How many years can a mountain exist
Before it's washed to the sea?
Yes, 'n' how many years can some people exist
Before they're allowed to be free?
Yes, 'n' how many times can a man turn his head,
Pretending he just doesn't see?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

... LLEVAN A...





TODOS LOS CAMINOS...




Esta ciudad incomparable por sus virtudes y sus vicios desde sus mismos orígenes persiguió imponer a las demás ciudades una tradición romana, ordenar la vida de los demás con la persuasión ilustrada de simplificar la vida humana; dio forma a un imperio que se extendía sobre tres continentes, sirviéndose como base de una sola ciudad, la cuidad por excelencia. Pero tan pronto como se convirtió en cuidad eterna, la ciudad precaria no supo desear para sí aquello que consideraba tan importante para las demás; la capital de un imperio de ciudades nunca logró convertirse en un modelo de organización y de vida ciudadana, y aquella limpia y a menudo simplista claridad de juicio humano, con la que trazó, organizó y administró centenares de ciudades, se nublaba aquí, en Roma, y se demoraba en todas las consideraciones posibles sobre las necesidades del momento.

Una ciudad eterna.
Cuatro lecciones de veintisiete siglos.
Ludovico Quaroni.


sábado, 21 de agosto de 2010

Anticristo

Ayer finalmente vi la última película de Lars Von Trier después de varios años detrás de ella, intentona de ir al cine incluída abortada por Sara. Menos mal que no la convencí. No voy a hacer ninguna crónica sobre ella pues no me siento preparado.
La polémica que suscitó habla por sí sola y está, además, justificada.
Cuando la película acabó me sentí horrorizado. Sin embargo, no puedo dejar de pensar en ella, y cuanto más lo hago, más me gusta. Supongo que poco a poco voy entendiendo lo que Lars nos quiere contar. Resumiendo mucho y quizá por ello siendo injusto, la película habla de cómo nuestros miedos y errores pueden apoderarse de nosotros hasta llevarnos a lo más profundo de nuestra naturaleza, esto es, convertirnos en animales completamente irracionales. El tema está muy visto, pero la propuesta de von Trier es una salvajada, tanto en el buen como el mal sentido de la palabra. La pelicula está cargada de imágenes sublimes, y digo sublimes por aterradoras, simbolismo, una fotografía excelente y un trabajo de los dos actores sobresaliente. Es admirable que un director sea capaz y encima se atreva a hacer algo así.
No voy a recomendar a nadie que la vea, puesto que podría ser tachado de enfermo mental. Os dejo simplemente la introducción de la película para que podáis entrar en contacto con ella y decidir si queréis verla o no. Sólo una recomendación: como la arquitectura, no es para pusilánimes.


viernes, 20 de agosto de 2010

El fantasma de Tom Joad

Esta canción ha sido una de mis favoritas desde el momento en que la conocí. Es un homenaje a la obra de Steinbeck "Las uvas de la ira", de la cual hay además una célebre versión cinematográfica. El libro no lo he leído, pero la película es muy recomendable.
No digo más, él ya lo dice todo.





The ghost of Tom Joad

Men walkin' 'long the railroad tracks
Goin' someplace there's no goin' back
Highway patrol choppers comin' up over the ridge
Hot soup on a campfire under the bridge
Shelter line stretchin' round the corner
Welcome to the new world order
Families sleepin' in their cars in the southwest
No home no job no peace no rest

The highway is alive tonight
But nobody's kiddin' nobody about where it goes
I'm sittin' down here in the campfire light
Searchin' for the ghost of Tom Joad

He pulls prayer book out of his sleeping bag
Preacher lights up a butt and takes a drag
Waitin' for when the last shall be first and the first shall be last
In a cardboard box 'neath the underpass
Got a one-way ticket to the promised land
You got a hole in your belly and gun in your hand
Sleeping on a pillow of solid rock
Bathin' in the city aqueduct

The highway is alive tonight
But where it's headed everybody knows
I'm sittin' down here in the campfire light
Waitin' on the ghost of Tom Joad

Now Tom said "Mom, wherever there's a cop beatin' a guy
Wherever a hungry newborn baby cries
Where there's a fight 'gainst the blood and hatred in the air
Look for me Mom I'll be there
Wherever there's somebody fightin' for a place to stand
Or decent job or a helpin' hand
Wherever somebody's strugglin' to be free
Look in their eyes Mom you'll see me."

The highway is alive tonight
But nobody's kiddin' nobody about where it goes
I'm sittin' downhere in the campfire light
With the Ghost of ol' Tom Joad.



El fantasma de Tom Joad

Hombres caminando por las vías del tren
Van hacia algún sitio, sin vuelta atrás
Los helicópteros de la policía estatal aparecen sobre la sierra
Sopa caliente en una fogata bajo el puente
La cola de desamparados ante el refugio da la vuelta a la esquina
Bienvenidos al nuevo orden mundial
Familias en el suroeste durmiendo en sus coches
Sin hogar, sin trabajo, sin paz, sin descanso

La autopista rebosa de vida esta noche
Pero nadie se engaña sobre el lugar al que se dirige
Estoy sentado aquí a la luz de la fogata
Buscando el fantasma de Tom Joad

Saca un misal de su saco de dormir
El predicador enciende una colilla y le da una calada
Esperando el momento en que el último sea el primero y el primero sea el último
En una caja de cartón bajo el paso inferior
Tienes un billete de ida a la tierra prometida
Un agujero en la tripa y una pistola en la mano
Durmiendo sobre una almohada de roca dura
Bañándote en el acueducto de la ciudad

La autopista rebosa de vida esta noche
Pero todo el mundo sabe el lugar al que se dirige
Estoy sentado aquí a la luz de la fogata
Esperando el fantasma de Tom Joad

Ahora Tom dijo: "Mamá, donde quiera que haya un poli pegando a un chico
Donde quiera que llore un niño recién nacido y hambriento
Donde se luche contra la sangre y el odio que hay en el aire
Búscame mamá, estaré allí
Donde quiera que haya alguien luchando por tener un sitio donde establecerse
O por un trabajo digno o una mano que le ayude
Donde quiera que alguien esté luchando por ser libre
Mírales a sus ojos mamá, me verás a mí."

La autopista rebosa de vida esta noche
Pero nadie se engaña sobre el lugar al que se dirige
Estoy sentado aquí a la luz de la fogata
Con el fantasma del viejo Tom Joad.

Bruce Springsteen

miércoles, 18 de agosto de 2010

La caverna

A continuación adjunto un breve texto sacado de un libro bien interesante. Con certeza no es ni lo más brillante ni lo más representativo del contenido del mismo, pero me pareció, por su simpatía, sencillez, y fuerza narrativa, una muestra atractiva para que alguien que no lo haya leído pueda animarse a ello. Ni siquiera se cuenta con estas pocas palabras nada que tenga que ver con el mensaje principal del relato. Se corresponde, si me perdonan los personajes, con la lectura menos trascendente o quizá banal del mismo. Para las más profunda, adjunto otra breve cita.
No es Saramago un escritor fácilmente abordable, y por desgracia su peculiar estilo puede desanimar a voluntades no demasiado entregadas, pero yo al menos puedo decir con satisfacción que la recompensa es siempre mucho mayor que el esfuerzo dedicado.


La plaza se quedó atrás, de repente, sin avisar, se le encogió el corazón a Cipriano Algor, él sabe de la vida, ambos lo saben, que ninguna dulzura de hoy será capaz de aminorar el amargor de mañana, que el agua de esta fuente no podrá matarte la sed en aquel desierto, No tengo trabajo, no tengo trabajo, murmuró, y ésa era la respuesta que debería haber dado, sin más adornos ni subterfugios, cuando Marta le preguntó de qué iba a vivir, No tengo trabajo.
En esta misma entrada, en este mismo lugar, como en el día que venía del Centro con la noticia de que no le compraban más loza, Cipriano Algor disminuyó la velocidad de la furgoneta. No quería llegar, quería haber llegado, y entre una cosa y otra ahí está la esquina de la calle donde vive Isaura Madruga, la casa es aquélla, de súbito la furgoneta tuvo mucha prisa, de súbito frenó, de súbito saltó de ella Cipriano Algor, de súbito subió los escalones, de súbito tocó el timbre. Llamó una vez, dos, tres veces. Nadie apareció para abrir la puerta, nadie dio señal desde dentro, no vino Isaura, no ladró Encontrado, el desierto que era para mañana se había adelantado a hoy. Y deberían estar aquí los dos, hoy es domingo, no se trabaja, pensó. Desconcertado regresó a la furgoneta, cruzó los brazos sobre el volante, lo normal sería preguntarle a los vecinos, pero nunca le había gustado dar a saber de su vida, verdaderamente, cuando estamos preguntando por alguien estamos diciendo sobre nosotros mucho más de lo que se podría imaginar, lo que nos salva es que las personas preguntadas, en su mayoría, no tienen el oído preparado para comprender lo que se oculta tras palabras tan aparentemente inocentes como éstas, Por casualidad ha visto a Isaura Madruga. Dos minutos después reconocía que, pensándolo bien, tan sospechoso debería ser estar parado esperando frente a la casa como ir, con ademán de falsa naturalidad, a preguntarle al primer vecino si, por casualidad, se había fijado en la salida de Isaura. Voy a buscar por ahí, pensó, puede ser que los encuentre. La vuelta por la aldea resultó inútil, Isaura y Encontrado parecían borrados de la faz de la tierra. Cipriano Algor decidió irse a casa, volvería a intentarlo al final de la tarde, Salieron a algún sitio, pensó. El motor de la furgoneta cantó la canción del regreso al hogar, el conductor ya veía las ramas más altas del moral, y de repente, como un relámpago negro, Encontrado vino desde arriba, ladrando, corriendo ladera abajo como si hubiese enloquecido, el corazón de Cipriano Algor estuvo a una pulsación del desfallecimiento, y no por causa del animal, este amor, por muy grande que sea, no llega a tanto, es que piensa que Encontrado no está solo y que, si no está solo, sólo hay una persona en el mundo que pueda estar con él. Abrió la puerta de la furgoneta, de un brinco el perro se le subió a los brazos, al fin el perro fue el primero, y le lamía la cara y no lo dejaba ver el camino, ese en el que aparece atónita Isaura Madruga, suspéndase ahora todo, por favor, que nadie hable, que nadie se mueva, que nadie se entrometa, ésta es la escena conmovedora por excelencia, el coche que viene subiendo la ladera, la mujer que en lo alto da dos pasos y de pronto no puede andar más, vean sus manos apretadas contra el pecho, a Cipriano Algor que sale de la furgoneta como si entrara en un sueño, Encontrado que va detrás y se le enreda en las piernas, sin embargo no sucederá nada malo, era lo que faltaba, caerse antiestéticamente uno de los personajes principales en el momento culminante de la acción, este abrazo y este beso, estos besos y estos abrazos, cuántas veces será necesario que os recuerde que el mismo amor que devora está suplicando que lo devoren, siempre ha sido así, siempre, pero hay ocasiones en que nos damos más cuenta. En un intervalo entre dos besos Cipriano Algor preguntó, Y cómo es que estás aquí, pero
Isaura no respondió en seguida, había otros besos que dar y recibir, tan urgentes como el primero de todos, por fin tuvo aliento suficiente para decir, Encontrado huyó al día siguiente de que te fueras, abrió un agujero en la cerca del huerto y se vino aquí, no hubo manera de obligarlo a volver, estaba decidido a esperarte hasta no sé cuándo, el único remedio era dejarlo, traerle la comida y el agua, hacerle un poco de compañía, aunque yo crea que no la necesitaba. Cipriano Algor buscaba en los bolsillos la llave de casa, mientras iba pensando e imaginando, Vamos a entrar los dos, vamos a entrar juntos, y la tenía finalmente en la mano cuando vio que la puerta estaba abierta, que es como deben estar las puertas para quien, viniendo de lejos, llega, no necesitó preguntar por qué, Isaura le decía tranquilamente, Marta me dejó una llave para que viniera de vez en cuando a airear la casa, a limpiarle el polvo, así, con esto de Encontrado, he estado viniendo todos los días, por la mañana antes de ir a la tienda, y al final de la tarde, después de acabar el trabajo. Dio la sensación de que tenía algo más que añadir, pero los labios se le cerraron con firmeza como para impedir el paso a las palabras, no saldréis de ahí, ordenaban, pero ellas se juntaron, unieron fuerzas, y lo máximo que el pudor consiguió fue que Isaura bajara la cabeza y redujera la voz a un murmullo, Una noche me quedé a dormir en tu cama, dijo. Entendámonos, este hombre es alfarero, trabajador manual por tanto, sin finuras de formación intelectual y artística salvo las necesarias para el ejercicio de su profesión, con una edad ya más que madura, se crió en un tiempo en que lo corriente era que las personas tuvieran que refrenar, cada una en sí misma y todas en toda la gente, las expresiones del sentimiento y las ansiedades del cuerpo, y si es cierto que no serían muchos los que en su medio social y cultural podrían echarle un pulso en cuestiones de sensibilidad y de inteligencia, oír decir así de sopetón de boca de una mujer con quien nunca yaciera en intimidad, que durmió, ella, en la cama de él, por muy enérgicamente que estuviera andando hacia la casa donde el equívoco caso se produjo, forzosamente tendría que suspender el paso, mirar con pasmo a la osada criatura, los hombres, confesémoslo de una vez, nunca acabarán de entender a las mujeres, felizmente éste consiguió, sin saber cómo, descubrir en medio de su confusión las palabras exactas que la ocasión pedía, Nunca más dormirás en otra. Realmente, esta frase tenía que ser así, se perdería todo el efecto si hubiese dicho, por ejemplo, como quien pone su firma en un pacto de conveniencia, Bueno, puesto que tú dormiste en mi cama, iré yo a dormir a la tuya. Se habían abrazado nuevamente Isaura y Cipriano Algor después de que él dijera, no cuesta nada imaginar con qué entusiasmo lo hacía, pero tuvo un súbito sobresalto del que los sentimientos de la pasión, al parecer, no participaban, Olvidé sacar la maleta del coche, fue esto lo que dijo. Sin prever todavía las consecuencias del prosaico acto, con Encontrado dando saltos tras él, abrió la puerta de la furgoneta y sacó la maleta. Tuvo la primera intuición de lo que sucedería cuando entró en la cocina, la segunda cuando entró en el dormitorio, aunque la certeza cierta sólo la tuvo cuando Isaura, con una voz que se esforzaba en no temblar, le preguntó, Has venido para quedarte. La maleta estaba en el suelo, a la espera de que alguien la abriese, esa operación, si bien que necesaria, podía aguardar para más tarde. Cipriano Algor cerró la puerta. Hay momentos así en la vida, para que el cielo se abra es necesario que una puerta se cierre.

José Saramago, La caverna



"Qué extraña escena describes y qué extraños

prisioneros, son iguales a nosotros".

PLATÓN, República, Libro VII

sábado, 14 de agosto de 2010

Otra ciudad para otra vida

Publicado en el # 3 de Internationale Situationniste (1959). Traducción extraída de Internacional situacionista, vol. I: La realización del arte, Madrid, Literatura Gris, 1999.



--------------------------------------------------------------------------------
La crisis del urbanismo se agrava. La construcción de los barrios, antiguos y nuevos, está en desacuerdo evidente con los modos de comportamiento establecidos, y aún más con los nuevos modos de vida que buscamos. Un ambiente mortecino y estéril es el resultado en nuestro entorno.
En los barrios viejos, las calles han degenerado en autopistas. El ocio está desnaturalizado y comercializado por el turismo. Las relaciones sociales se hacen imposibles en ellos. Únicamente dos cuestiones dominan los barrios construidos últimamente: la circulación en coche y el confort de las viviendas. Son la miserable expresión de la felicidad burguesa, y toda preocupación lúdica está ausente.

Ante la necesidad de construir rápidamente ciudades enteras, nos disponemos a construir cementerios de hormigón armado, en los que grandes masas de la población están condenadas a morirse de aburrimiento. Ahora bien, ¿para qué sirven los inventos técnicos más asombrosos que el mundo tiene ahora a su disposición, si faltan las condiciones para sacar provecho de ellos, si no añaden nada al ocio, si falta la imaginación?

Nosotros reivindicamos la aventura. Al no encontrarla en la tierra algunos se fueron a buscarla a la Luna. Apostamos siempre y sobre todo por un cambio en la tierra. Nos proponemos crear situaciones, y situaciones nuevas. Contamos con romper las leyes que impiden el desarrollo de actividades eficaces en la vida y en la cultura. Nos encontramos en el alba de una nueva era, e intentamos esbozar ya la imagen de una vida más dichosa y de un urbanismo unitario; el urbanismo hecho para el placer.

Nuestro campo es por tanto la red urbana, expresión natural de una creatividad colectiva, capaz de comprender las fuerzas creadoras que se liberan en el ocaso de una cultura basada en el individualismo. A nuestro entender, el arte tradicional no podrá tener lugar en la creación del nuevo ambiente en el que queremos vivir.

Estamos inventando nuevas técnicas; analizamos las posibilidades que ofrecen las ciudades existentes; hacemos maquetas y planos para ciudades futuras. Somos conscientes de la necesidad de servirnos de todos los inventos técnicos, y sabemos que las construcciones futuras que emprendamos tendrán que ser suficientemente flexibes para responder a una concepción dinámica de la vida, creando nuestro entorno en relación directa con tipos de comportamiento en constante cambio.

Nuestra concepción del urbanismo es social. Nos oponemos a la concepción de una ciudad verde, en la que los rascacielos espaciados y aislados reducirán necesariamente las relaciones directas y la acción común de los hombres. Para que tenga lugar una relación estrecha entre el entorno y el comportamiento, es indispensable la aglomeración.

Quienes piensan que la rapidez de nuestros desplazamientos y la posibilidad de telecomunicarse van a disolver la vida común de las aglomeraciones conocen mal las verdaderas necesidades del hombre. A la idea de una ciudad verde que han adoptado la mayor parte de los arquitectos modernos oponemos la imagen de una ciudad cubierta en la que, al separar los planos de los edificios y de las carreteras, se da lugar a una construcción espacial continua separada del suelo, que comprenderá tanto grupos de alojamientos como espacios públicos (permitiendo modificaciones de destino según las necesidades del momento). Como toda la circulación, en el sentido funcional, pasará por debajo o por las terrazas superiores, se suprimen las calles. La gran cantidad de espacios atravesables diferentes de los que se compone la ciudad forman un espacio social complicado y vasto. Lejos de un retorno a la naturaleza, de la idea de vivir en un parque como antaño los aristócratas solitarios, vemos en tales construcciones inmensas la posibilidad de vencer a la naturaleza y someter a nuestra voluntad el clima, la iluminación, los ruidos en los diferentes espacios.

¿Entendemos por ello un nuevo funcionalismo que ponga aún más en evidencia la vida utilitaria idealizada? No hay que olvidar que, una vez establecidas las funciones, les sucede el juego. Desde hace mucho tiempo la arquitectura se ha convertido en un juego con el espacio y el ambiente. La ciudad verde carece de ambientes. Nosotros queremos, por el contrario, servirnos más conscientemente de ellos, y que correspondan a todas nuestras necesidades.

Las ciudades futuras que estamos considerando ofrecerán una variabilidad inédita de sensaciones en este campo y harán posibles juegos imprevistos mediante el uso inventivo de las condiciones materiales, como el acondicionamiento de aire, la sonorización y la iluminación. Ya hay urbanistas que estudian la posibilidad de armonizar la cacofonía que reina en las ciudades actuales. No se tardará en encontrar en ellas un nuevo campo de creación, así como muchos otros problemas que se presentarán. Los anunciados viajes al espacio podrían influir sobre este desarrollo, ya que las bases que se establezcan en otros planetas plantearán de forma inmediata el problema de las ciudades a cubierto, que serán quizá el modelo de nuestro estudio del urbanismo futuro.

Ante todo, sin embargo, la disminución del trabajo necesario para la producción mediante la automatización extendida creará una necesidad de entretenimientos, una diversidad de comportamientos y un cambio de naturaleza de los mismos que llevarán forzosamente a una nueva concepción del hábitat colectivo que disponga del máximo de espacio social, al contrario que la concepción de ciudad verde donde el espacio social se reduce al mínimo. La ciudad futura ha de concebirse como una construcción continua sobre pilares o como un sistema ampliado de construcciones diferentes en las que estarían suspendidos locales de alojamiento, de recreo, etc. y otros destinados a la producción y a la distribución, liberando el suelo para la circulación y las reuniones públicas. La aplicación de materiales ultraligeros y aislantes como los que se experimentan actualmente permitirá una construcción ligera y soportes muy espaciados. De forma que se podrá construir una ciudad de varias capas: sótano, planta baja, pisos, terrazas, de una extensión que puede variar desde la de un barrio actual a la de una metrópoli. Hay que destacar que en tal ciudad la superficie construida será del 100% y la libre del 200% (parterre y terraza) mientras que en las ciudades tradicionales los porcentajes son del 80% y del 20% y en la ciudad verde esta relación puede, como máximo, invertirse. Las terrazas conforman un territorio al aire libre que se extiende por toda la superficie de la ciudad, y que puede dedicarse al deporte, al aterrizaje de aviones y de helicópteros, y al mantenimiento de vegetación. Serán accesibles por todas partes mediante escaleras y ascensores. Los diferentes pisos estarán divididos en espacios vecinos y comunicantes, acondicionados artificialmente, que ofrecerán la posibilidad de crear una diversidad infinita de ambientes, facilitando la deriva de los habitantes y sus frecuentes encuentros fortuitos. Los ambientes serán cambiados regular y conscientemente con ayuda de todos los medios técnicos, mediante equipos de creadores especializados que serán, por tanto, situacionistas de profesión.

Una de las tareas que estamos emprendiendo es un estudio profundo de los medios de creación de ambientes y de la influencia psicológica de los mismos. La tarea específica de los artistas plásticos y de los ingenieros es llevar a cabo estudios concernientes a la realización técnica de las estructuras portantes y a su estética. La aportación de los últimos sobre todo es de una necesidad urgente para hacer progresos en el trabajo preparatorio que nos proponemos.

Aunque el proyecto que acabamos de trazar a grandes líneas corre el riesgo de ser considerado como un sueño fantasioso, insistimos en el hecho de que es realizable desde el punto de vista técnico, deseable desde el punto de vista humano, y que será indispensable desde el punto de vista social. La creciente insatisfacción que domina a la humanidad alcanzará un punto en el que nos veremos empujados a ejecutar proyectos para los que poseeremos los medios y que podrán contribuir a la realización de una vida más rica y completa.

Constant

viernes, 13 de agosto de 2010

Sobre monumentos








Aquí subo algunas imágenes de Extremadura. La primera es una calle en Trujillo. El resto pertenecen a Mérida: un trozo de acueducto, los restos del circo, la reconstrucción de una ruina en la ciudad, un espacio previo al teatro, y el teatro mismo.
Aquí un textito querido.

''En estos últimos tiempos parece que va ganando terreno en nuestro país un criterio más moderno y científico que el hasta aquí seguido en la restauración de los monumentos antiguos. Aún tendremos seguramente que realizar muchas campañas en defensa de viejos edificios que se quieran restaurar radicalmente o completar, haciendo desaparecer su valor arqueológico, y, lo que es más grave, privándoles de la belleza y el factor pintoresco que el tiempo los ha ido prestando en una labor secular. Aun contemplaremos entristecidos, cómo se van sustituyendo las piedras perfectamente labradas, de aristas vivas, hasta convertir aquéllos en obras recién hechas, sin el menor deterioro ni la más pequeña incorrección. Pero esperamos que las generaciones futuras sean más respetuosas con nuestro patrimonio y tengan un espíritu más sensible para apreciar la pintoresca belleza de los restos arquitectónicos del pasado.
(...)
Muy antigua y muy moderna, sí. Muy antigua en cuanto que la arquitectura es un arte social de evolución lenta, y cada raza, cada pueblo, ha ido moldeándola durante centenares de años, según su peculiar espíritu. Muy moderna también: no cultivemos un arte de recuerdos, frío, sin alma, tratando de dar vida a un pasado irremediablemente muerto en nombre de un falso casticismo. Seamos de nuestro tiempo; no cerremos el espíritu a ninguna manifestación de arte, por exótica que sea; tal vez pueda fecundar de nuevo, a pesar de su exotismo, la tradición. Acojamos codialmente las nuevas formas, y huyendo de toda afectación, lo peor en arte, tratemos de expresar la vida plena y totalmente, la vida formada por los sedimentos del pasado y las nuevas aportaciones de un presente en constante transformación.
Vivamos, apasionada y libremente, nuestro tiempo.''

L. Torres Balbás, 1918

martes, 10 de agosto de 2010

Fado da Saudade


Ayer tuve la suerte y el privilegio de ver a Carlos do Carmo, uno de los grandes cantantes de fado, en los jardines de Sabatini, en ese escenario cuyo fondo está presidido por el Palacio Real.
Viví momentos de emoción que quiero compartir con vosotros con este fado, que, por otro lado, ganó el Goya a la mejor canción original en la película de Carlos Saura.
Contaba el artista que para que haya fado tienen que estar en conexión y armonía los tres elementos o grupos que lo componen: músicos, cantante y público.




Nasce o dia na cidade, que me encanta
Na minha velha Lisboa, de outra vida
E com um nó de saudade, na garganta
Escuto um fado que se entoa, à despedida
E com um nó de saudade, na garganta
Escuto um fado que se entoa, à despedida

Foi nas tabernas de Alfama, em hora triste
Que nasceu esta canção, o seu lamento
Na memória dos que vão, tal como o vento
O olhar de quem se ama e não desiste
Na memória dos que vão, tal como o vento
O olhar de quem se ama e não desiste

Quando brilha a antiga chama, ou sentimento
Oiço este mar que ressoa, enquanto canta
E da Bica à Madragoa, num momento
Volta sempre esta ansiedade, da partida
Nasce o dia na cidade, que me encanta
Na minha velha Lisboa, de outra vida

Quem vive só do passado, sem motivo
Fica preso a um destino, que o invade
Mas na alma deste fado, sempre vivo
Cresce um canto cristalino, sem idade
Mas na alma deste fado, sempre vivo
Cresce um canto cristalino, sem idade

É por isso que imagino, em liberdade
Uma gaivota que voa, renascida
E já nada me magoa, ou desencanta
Nas ruas desta cidade, amanhecida
Mas com um nó de saudade, na garganta
Escuto um fado que se entoa, à despedida


Nace el día en la ciudad, que me encanta
En mi vieja Lisboa, de otra vida
Y con un nó de saudade, en la garganta
Escucho un fado que se entona, a la despedida
Y con un nó de saudade, en la garganta
Escucho un fado que se entona, a la despedida

Fue en las tabernas de Alfama, en hora triste
Que nació esta canción, el suyo lamento
En la memoria de los que van, tal como el viento
El mirar de quien se ama y no desiste
En la memoria de los que van, tal como el viento
El mirar de quien se ama y no desiste

Cuando brilla la antigua llama, o sentimiento
Oiço este mar que resuena, mientras canta
Y de la Bica a la Madragoa, en un momento
Vuelve siempre esta ansiedad, de la partida
Nace el día en la ciudad, que me encanta
En mi vieja Lisboa, de otra vida

Quién vive sólo del pasado, sin motivo
Queda prendido a un destino, que lo invade
Pero en el alma de este fado, siempre vivo
Crece un canto cristalino, sin edad
Pero en el alma de este fado, siempre vivo
Crece un canto cristalino, sin edad

Por eso es por lo que imagino, en libertad
Una gaivota que vuela, renascida
Y ya nada me magoa, o desencanta
En las calles de esta ciudad, amanecida
Pero con un nó de saudade, en la garganta
Escucho un fado que se entona, a la despedida

viernes, 6 de agosto de 2010